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El congreso de Catoira abogará por la especialización de entrenadores en canoa femenina
Istvan Vaskuti, vicepresidente de la Federación Internacional y Gugliermo Guerini, entrenador de la selección italiana, serán algunos de los profesionales que se desplazarán a España en octubre para participar en la V edición del congreso internacional de entrenadores
Tras Londres y Lima, el debate olímpico se traslada a Catoira, dónde además los entrenadores tendrán la oportunidad de seguir formándose con los últimos avances en preparación de deportistas
Las Olimpiadas de Tokio 2020 supondrán un punto de inflexión en el piragüismo olímpico. A partir de ahí, y a fin de cumplir las nuevas normas olímpicas sobre paridad de género, se reducirán el número de modalidades masculinas en liza a fin de dar entrada a más modalidades femeninas. Por ello, especialistas internacionales como el seleccionador italiano Gugliermo Guerini, abogarán en el seno del V congreso Internacional de Entrenadores de Piragüismo en Aguas Tranquilas por la necesidad de que existan entrenadores especializados en la formación de las mujeres canoistas.
Será precisamente en el seno de dicho Congreso, que se celebra en Catoira los días 10,11 y 12 de octubre, dónde se discuta qué modalidades femeninas se incorporarán a las Olimpiadas a partir de Tokio.
A raíz del cambio trascendental que se producirá en las Olimpiadas, “se necesitarán más entrenadores que trabajen para comprender y especializarse en las diferentes tipologías de las atletas femeninas”, explica Guerini. “Tener más mujeres en canoa y kayak en los Juegos Olímpicos necesita también acercar a la gente al piragüismo femenino pues una disciplina más significa más mujeres compitiendo y significa que la Federación ponga en funcionamiento el sistema de identificación de talentos para descubrir nuevas atletas, recursos económicos y proyectos orientados a desarrollar las nuevas disciplinas. Para tener más mujeres en el deporte se necesita que la federación las ayude y apoye para que puedan tener una familia, niños, y vivir una vida normal durante su larga carrera”, concluye.
Respecto al aspecto técnico, el seleccionador italiano entiende, que “para tener más mujeres en canoa y kayak olímpicos, se necesita cambiar la distancia en la competición. En kayak se debe igualar la distancia con la competición masculina: K-1,K-2 Y K-4 1000 metros y K-1, 200 metros”.
Los intereses de los distintos países en competición se contraponen y mientras que hay países como Alemania que prefieren mantener las modalidades que requieren más resistencia, como puede ser la K-2 1000, en la que tienen más opciones de medalla, otros como es el caso de España apuestan por la velocidad y lucharán por mantener modalidades como la k-2 200.
Cabe recordar que en este momento son modalidades olímpicas masculinas de kayak: K-4, K-2 y K-1 en mil metros y K-2 y K-1 en 200 metros. Y de canoa, C-1 en 1000 y 200 metros y c-2 en 1000. Las piragüistas en cambio solo tienen cuatro modalidades de Kayak: K-4, K-2 y K-1 en quinientos metros. Y k-1 en doscientos metros, siendo la introducción de la canoa femenina en los JJ.OO uno de los grandes temas a abordar.
En este sentido, Guerini entiende que su apuesta (K-1,K-2 Y K-4 1000 metros y K-1, 200 metros) sería buena para la especialización de las deportistas: “De esta manera las dos carreras son tan diferentes que no puede ser posible que las competidoras de 1000 metros lo sean también de 200. Sin embargo, desde los 500 metros, hay entre un 30 y un 50 por ciento de deportistas que completan también los 200. Por ejemplo, en los últimos campeonatos del mundo en Moscú, 4 competidoras de la final de 200 estuvieron en la de 500. Unificar la distancia entre hombres y mujeres significa tener diferentes tipos de atletas así como diferentes fisiologías y de este modo tenemos más posibilidades de que las mujeres se igualen a los varones en esta disciplina”.
Hito histórico para el piragüismo
El seleccionador italiano impartirá el 11 de octubre en Catoira, a las 12.45 horas, la conferencia “Mujer y Piragüismo. Entrenamiento deportivo en la mujer”. Le precederá en el estrado el vicepresidente de la FIC ( Federación Internacional de Remo), Istvan Vaskuti, que explica cómo se gestó esta importante decisión en el seno del máximo organismo decisor: “Aparte de los deportes olímpicos, el promedio de competiciones femeninas fue hasta hace poco uno de los más bajos en el deporte del piragüismo, dónde solo había competiciones masculinas. Los directivos de la FIC vieron que la situación necesitaba un cambio y en su reunión en Londres en 2009, discutieron sobre la introducción de la canoa femenina en el programa de los campeonatos mundiales. Después de este primer evento mundial, el campeonato femenino de C-1 200 m tuvo lugar en Poznan en 2010 y el de C-2 se incluyó en el programa como una carrera de demostración. En el mismo año el slalom femenino de c-1 tuvo lugar por primera vez en el campeonato del mundo de Tacen. Desde el 2013, la carrera de C-2 también está incluida en el campeonato mundial. La directiva de la FIC abordó, en la conferencia celebrada en Lima en 2013, la posibilidad de que la carrera femenina de C-1 fuese incluida en los juegos olímpicos de Tokyo 2020 tanto en sprint como en slalom. Estos cambios serían el resultado del desarrollo de las canoistas femeninas, que alcanzaron el nivel de competición de unos juegos olímpicos después de diez años de trabajo. Ahora, en el piragüismo olímpico se establecerá una proporción adecuada entre competiciones masculinas y femeninas”.
Tras Londres y Lima, el debate olímpico se traslada a Catoira, dónde además los entrenadores tendrán la oportunidad de seguir formándose con los últimos avances en preparación de deportistas.
Los que deseen asistir deberán inscribirse a través de la página web www.congresocatoira.es
Para más información: Manuel Isorna (director Congreso):679-851600
